Un lugar de visita obligada si subimos a Los Montes de Málaga es el Mirador del Cochinillo, ofreciéndonos una panorámica increíble de todo el territorio malagueño.
Para empezar veremos una escultura creada por Francisco Martín. Se trata de un jabalí construido con chatarra recogida en las cercanías. A nuestro alrededor vemos el bosque del mediterráneo, caracterizado por encinas, quejigos y alcornoques.
Tras la gran plaga que hubo del insecto filoxera que acabó con gran cantidad de estos árboles, fue replantado por Pino Carrasco, un árbol con un alto poder expansivo y que ha día de hoy convive con el resto.
A día de hoy todavía se observan manchas negras en algunas zonas, debido al incendio en 1989
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